viernes, 20 de agosto de 2010

Artistas unidos jamás rendirse, jamás....


-1RA PARTE- Por Juan Videira

En el marco de la Feria nacional de artesanos organizada por la Dirección de Cultura local, la Asamblea por una Cultura Democrática organizo una protesta artística, a metros de la entrada a la carpa "oficial".


El reclamo concreto que viene manifestando esta asamblea es la libertad de expresión para los artistas locales, una gestión transparente que ofrezca oportunidades a todos los que mediante el arte deseen expresarse, y que tengan un lugar en las carteleras de la Dirección de Cultura, como cualquier debe ser. Además, que a la hora de recurrir a los artistas, no sean solo unos pocos los que figuren en la agenda de la directora de Cultura local.


Por estas fechas y también a modo de reclamo, un año atrás nació este organismo en la ciudad, motivado por las incesantes quejas de los participantes culturales que ofrecen su trabajo en Tres Arroyos.


Varios son los que por una u otra causa se han quedado afuera de distintos eventos: mala imagen, falta de recursos económicos (por ejemplo aportar para el sonido de una banda), por no coincidir con la ideología del gobierno de turno, por hacer rock (suena insólito ¿No?) y tantas otras cuestiones.

En este periodo de un año, logramos llevar la feria a la plaza, con artesanos y variados espectáculos artísticos ofreciéndole al ciudadano, una opción más para el entretenimiento y la toma de conciencia. Siete festivales, con la presencia de artistas de distintos puntos del país, música, circo, canto, danza, y vale remarcar el exitoso festival OYE ESTA VOZ donde actuaron bandas locales y de la zona.


En cuestión, lo que se siembra, se cosecha. Actualmente el grupo es cada vez mas amplio, abarcando gente de todos los ámbitos que apoyan este movimiento que apunta a la libertad y a la democracia, derechos de todos los habitantes.


El arte no requiere de muchos recursos económicos para dar luz y así lo venimos demostrando en cada acto o evento que se organiza, a veces no se necesitan grandes billetes para organizar una muestra, el aire es libre y con voluntad todo se puede.


La feria "oficial", tuvo éxito. La contra-feria también. Quedo a la vista de todos los tresarroyenses que por allí pasaron (la fila para entrar a la feria se topaba con el festival de la asamblea), que algo se estaba proponiendo, que alguien estaba cantando afuera y no adentro, y eso tiene un porqué, un motivo. Mediante Cultura Para Todos te enterás un poco, La voz del pueblo también hizo lo suyo, las radios locales, todos dieron a conocer, al fin, después de un año de lucha, que existimos, que somos y seremos, y el cambio es inminente.


El cambio aquí nombrado se refiere a que Sonia Finocchio, quien dirige el área de Cultura, tiene 15 años en el puesto, demasiados para un funcionario municipal que ha conservado su estilo hermético ante las nuevas corrientes de artistas locales. Estaría bueno un cambio a tiempo, ya que últimamente respiramos un aire nuevo, de renovación, para abrir nuevos caminos. No es casualidad que un gran porcentaje de artistas se queje de esta gestión.


En los días que se llevó a cabo la feria, pasaron por la calle: Jorge Ferrer, Rotas Cadenas, María Esther RIffe, VagonetaSKA, Diamante de sangre, Charlatanes de feria, Grupo de candombe, Break dance con los chicos de "El Parquecito", Radio Abierta INDIE ROCK, Poesía de paso. Además de mucho mate, alguna que otra rubia y por sobre todas las cosas vibraciones positivas.

miércoles, 18 de agosto de 2010

La Asamblea por una Cultura Democrática resalta el diálogo concreto y ameno con el Intendente


El intendente Carlos Sánchez se reunió con la Asamblea por una Cultura Democrática en el marco de los pedidos que se hacen por la gestión en el área cultural

Al Jefe Comunal se le expusieron los reclamos sobre “los artistas censurados, el escaso espíritu democrático y la falta de transparencia”.

Uno de los puntos abordados fue que funcione la Comisión para la Cultura a través de la cual se coordinaría con la Dirección municipal correspondiente para “generar proyectos e incluir a aquellos aristas que hoy están fuera”, según dijo Flora.

“Toro” Brito, integrante de la Asamblea y partícipe activo de “El Vagón de los Nadie”, dijo que fue un diálogo concreto y ameno, y se pudo hacer una propuesta.

La Asamblea considera este encuentro “un paso importante” en la tarea que viene realizando desde hace un año.

Ahora se esperarán unos quince días para saber si se cumple con lo acordado. Se indicó que “el Intendente no estaba al tanto de cosas que sucedían, y que ahora quiere tomar decisiones para lograr consenso”.

Fuente: http://www.radiotresarroyos.com/

lunes, 9 de agosto de 2010

"EL SECRETO DEL ÉXITO ES LA MONADA"


Por Nicolás Besimenko

En una charla mano a mano con el "dueño" de las mejores noches
claromequenses y tresarroyenses en los 90, Pablo Romano nos hace viajar en el tiempo para revivir esos veranos descontrolados y explicar el porqué de un éxito único en nuestra ciudad que supo mantener una gran "monada" de fiesta cada fin de semana.

¿Porque volvió el Mono?


Cuando en 2003 cerré, convergieron muchas cosas, hubo muchas causas . Demasiadas cosas que me estaban cargando mucho. Yo terminé enojándome porque había demasiados requisitos, y yo los cumplía. Pero me tocaba competir con otra gente que no tenía nada. Era demasiado despareja la competencia. Y después, había cambiado mucho la noche, la gente a la hora de divertirse, había mucho más mala onda, más pelea, que después se siguió viendo. Fueron varias cosas, imposible enumerar. Igual siempre me quedó la pregunta de qué haría si volvería.

Un día se me ocurrió esto del salón de fiestas que permite, acondicionado de una manera, bastante particular porque parece un boliche pero se usa para salón de fiestas y de vez en cuando hacer una noche tipo boliche, como lo era Monkey. Y está buenísimo, porque yo a esta altura, como mucha gente que pasó los veintipico, no va a salir todos los fines de semana, entonces está bueno hacer algo de vez en cuando. Para todos, para la "monada" que ya sale de vez en cuando y para mí que ya no estoy para estar todos los fines de semana otra vez.

¿Como viviste el post-Monkey?

Fue difícil el tema del ya no ser, esa especie de duelo que uno hace. En el caso mío era terminar una etapa, yo venía trabajando a full, empecé a los 23 años. Era todas las noches del verano, todas las noches de la primavera, más viernes y sábado todo el año. Imaginate que estuve 14 años con el boliche en Claromecó y en Tres Arroyos llegó a 5, es como toda una vida, entonces cortar de golpe es todo un tema.

¿Cuál fue la época que más disfrutaste?


El mejor año de Monkey fue el verano 92`, fue algo muy particular, era en un Monkey que hasta ya no existe, porque lo demolieron al lugar, es una construcción que ya no existe. El boliche abre en el 90, hace 90, 91 y en el 92 fue algo espectacular. Porque hacíamos joda en la playa, después pasaba a la noche y era como un club, ahí es donde nace un poco el club de Monkey. Era como un líving grande el boliche. Se juntaba gente a la tarde, vos pasabas a las 3 de la tarde para ir un rato a la playa y entrabas un rato en Monkey, te tomabas 3 o 4 mates y seguías. Justo quedaba a media cuadra de la playa, entonces quedaba muy en el centro. Es muy recordado eso por la gente. Después otro verano que fue muy bueno, el 95.

Otro que me acuerdo el 2000 acá, ese invierno, de marzo a diciembre, fue muy buena, con mucha onda, se hicieron muchas cosas. Se trabajo, se hicieron varios eventos, al estilo de Monkey. Hubo otra movida muy grande, parecida a la de Claromecó. Y las primaveras todas, lo que pasa que las primaveras son, vistas desde éste lado, desde mi lugar, son maratones de trabajo que terminás fusilado porque son 5 días sin parar. Te acostás a las 8 o 9 de la mañana y te levantás a las 2 de la tarde, y le das de corrido hasta el otro día. Y buffle para acá, aquello para allá. Matador.

Aparte del desgaste mental, te liquida el cuerpo, con los recitales y demás. Y aparte no dormís. Así que las primaveras para la gente fueron buenas y para mi, matadoras.

¿Te quedaba espacio para disfrutar?

Sí, a la noche, cuando estás poniendo música. Después durante el día era morirse. Era terminar, donde se iba la gente del recital o lo que hubiese, ahí empezabas a desarmar. La gente ya se había ido hace una hora a bañarse o a comer y nosotros estábamos ahí todavía.

¿Y la pasión por la música la traías de chiquito? ¿Venía de familia?

Si, yo creo que tiene que ver con la familia, con algo genético dando vueltas, y también se manifestó muy de chico. Yo tenía 10 años ya cuando empezaba a darle bola a la música, creo que diferente de otro chico, no sé, no conozco algo igual. Mi hermana, que me llevaba dos años y medio, ella estaba con todo el tema de la música por la adolescencia y yo estaba a la par de ella. Y después me picó cada vez más fuerte...(risas).

Con respecto a la movida nocturna en Tres Arroyos, el Mono cada vez que abre se llena y es un éxito todas las noches ¿Cuál es el secreto?

...(piensa). Seguramente hay un secreto, un analista de mercado te lo saca al "toque". Lo que creo es que desde este lugar, yo puedo proponer, puedo pintar el local, puedo poner luces, puedo poner excelente música, puedo poner, que se yo, caras lindas a atender...Y no sé si pasa por ahí, para mí, hay una magia entre medio. Yo siempre digo que acá la monada es tan importante como el lugar. Yo tiro un tema, pero del otro lado está la monada que responde. Es como que uno va de la mano del otro. Cualquier músico que le preguntes que es lo que más te gusta de tal lugar, te va a decir el público: "¿Que recordás de cuando fuiste a tocar, no sé, a Necochea? El público que era muy frío. ¿Y en Olavarría? Ah, el público espectacular. ¿Volverías a donde? A Olavarría, ni hablar". Bueno, acá un poco se da eso. Hay una magia que no es secreta y no es ningún secreto comercial. Hay 14 años de Mono, de gente que fue pasándola bien en esa etapa, valora un montón de cosas que hicimos, porque fue entre todos, nosotros propusimos y ellos fueron, participaron. Entonces hoy es una onda que está generada y nosotros cubrimos las expectativas, cumplimos desde este lado laburando, no nos quedamos. Se sigue renovando, se sigue mejorando, si la gente dice que hace calor, tendremos que poner aire acondicionado. Si hace frío, a meter calefacción. Y así. Mejoras constantes para cubrir las expectativas de la gente y que lo pase bien. Y eso, aunque parezca "la" fórmula, tendría que ser lo normal. Vos salís a la noche, y no lo tenés. Siempre vas a encontrar, que el baño está sucio, o que suena feo. Lo que es el servicio, faltan cosas.

¿Son determinantes esos detalles?

Claro, son detalles que suman un montón. Vos no podés pretender que en un lugar que entran 200 personas, meter 700 y que la gente esté contenta. Todo eso te va sobrecargando y un día que dan algo que realmente esta a la altura de una mínima ambición que tiene cada uno cuando sale, decís "¡Que bueno!" y eso es un poco lo que pasa. Lo que nosotros hacemos debería ser lo normal. Ir a un baño y no patinarte en las ganas de ir al baño. Eso lo valora la gente.

¿No te sorprende que algo que es normal te lo elogien tanto?


Me sorprende pero es una sorpresa media fuera de tiempo, atemporal. Cuando existía Monkey Disco, era bastante similar a lo que ven hoy. Había otra estética, pero lo que es funcional era bastante similar. Y como se trabajaba con chicos, de 14, 15 a 20 años, la mayoría entre 14 y 16, tienen otra valorización de las cosas, en esa edad pasa. Y más cuando estás hablando como una masa, la masa no valora. En esa edad no sos personal, no decís "Yo voy a tal lugar porque me encanta como ponen los vasos arriba de...". No. Vas y le ponés onda como todos los demás. Todos van para allá y vos vas para allá. Siempre trabajando con los "pendejos". Cuando yo cerré había mucha gente enojada con Monkey. Había mucha gente enojada porque pretendíamos cobrar la entrada. Porque todas las competencias estaban regalando todo para poder terminar de ganar o sobrevivir como un lugar. La situación económica era bastante compleja.

Esto es un chiste, es para escribir un libro: en el 2003 la gente estaba enojada porque cobrábamos 3 pesos varones y uno mujeres. No querían que cobráramos. Nosotros abrimos el boliche en el año 1997 y cobrábamos 6 (hombres) y 4 (mujeres). Del 97 a Febrero del 2003, que cerramos, estaba todo devaluado, todo con quilombo, todo había subido y se estaba cobrando más barato y la gente estaba enojada. También fue una especie de psicosis eso, medio inexplicable. En esa época no les importó que se cerrara, y con el tiempo se fue dando más valor.

A mi me paso que cuando terminé con el boliche, quise salir a bailar, y empecé a conocer las competencias de Monkey, que no las conocía, no sabía como trabajaban, que hacían ni nada. Dejé de salir porque no me gustó nada, je. Era muy raro, porque si bien salí como cliente, pero desde una edad que no era la que yo vendía. De repente iba yo a un boliche de 17 con 35 años, algo que no encuadraba. Pero intente ir a lugares que supuestamente eran de "grandes" y tampoco me gustaron.

¿Como te llevás con la música que se escucha ahora?

La música siempre cambia. De lo que hay ahora me gustan bastantes cosas, el reggaeton me divierte en algunas cosas, me divierten algunas cosas, son entretenidos, creativos algunos. Obviamente estoy hablando que me debe gustar el 5 o 10% de todo lo que hay. Después de la cumbia nueva, conozco muchos temas. Pero no me parece divertido, me parece más tango cantado en formato cumbia, la más elaboradas. Demasiada pena tienen para cantar, no hay cumbia divertida. Sí hay más cumbia resentida y violencia. Y después la música electrónica, que es lo que siempre sobrevive y está ahí, ha ido cambiando de estilo, han surgido estilos nuevos, pero bueno, hay de todo. Tenés siempre para elegir y es cuestión de ir renovándose nomas.

Hay temas que me gustan, hay cosas que me parecen creativas. Lo que ha ido cediendo mucho espacio es la música nacional, cediendo espacio en lo que es baile. Ya no se baila un nacional nuevo como se bailaba antes. Ha ido dejando el lugar y no lo recupera. Le ganó el reggaeton, le ganó el latino, no sé quien le ganó pero no se baila. Pensá en 7 años atrás, se bailaba Los Piojos, se bailaba Bersuit, se bailaba Redondos, aunque era viejo, pero se bailaba lo nuevo del rock nacional. Hoy la música nacional no ocupa un espacio, no está el espacio. No sé porque razón, si por falta de difusión o porque no pega.

¿Se está volviendo a recrear el ambiente de los 90 mediante la música?

Si, yo digo que puede ser, no sé como se manejan en los demás boliches. No tengo ni la más pálida idea. Me hizo acordar una publicidad que sonaba el mismo tema: prendés la radio y lo escuchás, prendés el calefón y lo escuchás, abrís la heladera y lo escuchás. Y siempre el mismo tema. Hoy con respecto a la música nueva, vas a cualquier lado, prendés cualquier radio, y lo escuchás. Salvo cumbia, que no en todas las radios pasan. Me parece que dándole unos toques y la dosis justa de cada cosa, puede ser más entretenido una fiesta retro que una noche normal. En todas las noche "normales" que hemos hecho, que tampoco son "normales", ponemos una hora de música nueva repartida, mezclada entre todo lo viejo que se pone. Creo que si no sale nada nuevo, bueno, ¡busca dentro de todo lo viejo otra cosa más buena!.

¿Como juegan los gustos en la cabeza de un DJ?


A mi me gusta mucho la música electrónica, y hay gente que no lo cree. Y yo me pasé toda la vida pasando Nacional, Cumbia, Latino en un 90% y el otro 10% música electrónica. Me gustaría pasar más música electrónica, pero no tenés público, es más complicado. Entonces digo, mi gusto está relegado a como pegue en la gente. Me encantaría que la gente se cope y diga, bueno, vamos a hacer una hora de electrónica. Como no se puede, cambio de música automáticamente, me importa más que la gente se divierta, que sacarme las ganas de poner música electrónica.

¿No se puede?


Es complicado, para tener una buena noche de música electrónica, de público que baile electrónica, tenés que empezar con una previa que en el Mono se hace, dicho en criollo: "que en el aguante se embolen un poco". Entonces cuando largas con música electrónica, la sienten más inspiradora, pero acá, ya de entrada se baila en "el aguante". Los "aguantes" de Monkey siempre fueron muy bailados, muy divertidos, entonces cuando le ponés electrónica es como que los bajás. No les pega bien. Yo he intentado, y de hecho paso. Pero no viaja mucho.

"TRES ARROYOS ES MUY CARETA"


Por Nicolás Besimenko
Si repasamos las últimas dos décadas del abanico artístico de Tres Arroyos, no podemos ignorar la trayectoria de una banda que marcó a fuego un cambio en la música local. La aparición de Metanol fue una señal de vida para los jóvenes que transitaban la mitad de la década del 90, un cambio de aire que abrió un nuevo camino del rock en nuestros pagos. Uno de los históricos fundadores, actual voz de la formación, Fernando Benítez, nos cuenta los inicios, las influencias, que tipo de género son, la relación con las demás bandas y hasta su relación con el Facebook y las nuevas tecnologías.


¿Como surgió Metanol?

Metanol arranca en el año 95, veníamos de una banda que era medio heavy-rock, se llamaba Anarquía del rock. Cuando empezó Metanol, fue con muchas influencias de Nirvana, de los años 90, de Pearl Jam, Alice in chains.

¿Venían del punk?
No, no, nunca vinimos del punk, pero si teníamos un toque ése género por la rebeldía de la edad y de lo que veníamos viviendo. Pero no era netamente punk el "mambo" que teníamos en la cabeza. Era siempre rockero, a mí me influenciaba mucho bandas como Vox dei, The Beatles, y después Metallica, los Guns (and Roses), de todo un poco. No empezamos como una banda de metal. Empezamos con un rock casi tirando a pop diría.

El primer disco, si lo escuchás es medio "popero". El click del metal surgió cuando ingresó Diego (Pascucci), cuando empezamos a escuchar bandas en el 2000 más polentas. Ya escuchabamos que se yo, Pantera, Sepultura, etc. Bandas muy, muy "grosas" que nos "flasharon" la cabeza y ahí fue cuando nos hizo el click del metal. Bajamos la afinación, nos pusimos a engordar un poco y ese fue el click del metal, antes no eramos metal.

¿Hubo una influencia bien marcada en sus antepasados?

Si, si, influencias tenemos del año 90`, calculá que yo arranque en ése año con la primer banda. Hace 20 años. Calculá que la influencia que teníamos en el 90´ no es la misma que tenemos ahora. Más allá de la evolución como músicos que podamos llegar a tener, el sonido en 20 años a variado un "bolazo". Entonces las influencias no son las mismas que ahora. En el 2000 nos tomamos una influencia más poderosa, más metal, no heavy. No somos heavy, y nunca creo que vamos a ser heavy. Pero si somos del rock pesado. Un hard-rock más pesado. Más del 2010, hard-rock 2010.

Durante 15 años han pasado por muchos escenarios en la ciudad y la zona, ¿que opinión tenés del público tresarroyense? ¿Pudieron insertar el metal en la sociedad?

La sociedad de Tres Arroyos es totalmente cerrada. Por lo que yo te puedo decir, Tres Arroyos es muy "careta". Viene una banda de afuera y habíamos 100 metaleros, y voy a tocar yo a un lugar y no va nadie. Y va a tocar otra banda de metal y yo no la voy a ver tampoco. Son muy "caretas" acá. Una vuelta fuimos a tocar a Dorrego me acuerdo, que nos hicieron más el aguante y no nos conocía nadie, que acá que somos conocidos. La gente de Tres Arroyos es muy prejuiciosa. O porque sos de acá no te valoran. Vamos a tocar a otro lugar y la rompemos, hasta autógrafos te piden, y acá no te dan ni la hora.

¿Como ves la cultura del rock en Tres Arroyos, que ha crecido mucho en la última década pero tiene escasa difusión? ¿La falta de apoyo económico les impide vivir del rock?

Y de nosotros, ninguno vive de la música. Todos tenemos nuestro laburo. Durante tantos años, pudimos ir recolectando unos mangos, comprándonos equipos, iluminarias, vamos enriqueciendo el show en la medida que podemos.
Los medios, hasta hace 5 o 6 años atrás eran una muerte, una muerte total. Ahora, gracias a Dios está la Indie Rock, que apoya las bandas, apoya el rock tresarroyense. Está Ceferino Pardo que hizo un blog para las bandas de acá, que se yo. Son cositas que van sumando y hasta te incentivan, que la gente te apoye. La gente hasta empieza a ir a los recitales porque te vio en un blog o te escuchó en la radio que la banda sonaba buena.

¿Como ves la era digital, les sirve a las bandas?

Si, totalmente. Nosotros lo usamos, estamos todo el tiempo haciendo cadenas de mails, por facebook y en cierta manera, hasta sacamos sonidos digitales. Estamos experimentado cosas también.

¿Que tipo de show ofrece Metanol actualmente?

Y lo nuestro es algo maduro, gente madura, poniéndole la mejor onda como siempre y el mejor poder que tengamos. Y ahora incorporamos a Simón Canosa, un chiquito de 6 años, que nos acompaña y nos incentiva también a que haya público joven. Nosotros venimos de tantos años y ya pasamos por esa etapa. Calculá que yo veo chicos que van al recital y los padres decían "Si, yo lo vi a Metanol", tienen 15 o 16 años y nos van a ver. Un chiquito de 6 años es una segunda generación. Yo estoy recontento con eso, pero más que nada lo nuestro es un rock más maduro.

¿Como es la relación con las demás bandas?

En 20 años hemos tenido relación de todo tipo, buenas y malas. Hace muchos años hicimos un evento que se llamaba "Tres Arroyos Rock", que lo hacía Carmen que es mi señora, con Paula, una amiga. No tocábamos nosotros, yo perdí plata para que la gente toque y después me terminaron saliendo con cualquiera. Hay cosas en el ojo que uno, no te digo que te quedán para siempre, de última, a partir de esas cosas empezás como a ver la onda de las demás bandas. Yo a las demás bandas, voy a ver pocas, te digo la verdad, por una cuestión de que tengo familia, que laburo. Trato de ir a ver las que más puedo. Hay muchas bandas nuevas que no las conozco directamente. Y ellos tampoco nos van a ver a nosotros.

(La entrevista se realizó en la semana previa al show de Metanol en La Casona, el 07/08, en el para el programa radial Antiranking)